Las bodas de la güera

Si bien es más común escuchar el término “maridaje” cuando se habla de vinos, la combinación para potenciar los sabores de la comida y la cerveza ha cobrado mayor importancia en los últimos años dentro del mundo gastronómico. Para tener un buen maridaje hay que tomar en cuenta algunos criterios. Los sabores de la cerveza no deben de sobresalir sobre los de la comida y viceversa. Debe de existir un equilibrio entre sabores y aromas, o bien, que haya un contraste de polos que se empaten.

Para apreciar una cerveza hay que consumirlas a 5 oC las lager y a 11 oC las oscuras; el vaso o tarro puede estar frío, mas no congelado, y lo ideal es dar dos sorbos, el primero para humedecer la boca y, el segundo, para paladear sus características.

La cerveza es la bebida perfecta para acompañar la comida mexicana ya que es la contraposición ideal a la sensación que producen los sabores picante y contrarrestar los sabores fuertes. Además, sirve para limpiar el paladar cuando se consumen platos grasos como carnitas.

Las lager combinan de extraordinaria manera con cochinita pibil, enchiladas potosinas, cabrito, tacos de carnitas, sopes, pozole, cecina, unas buenas “garnachas”, barbacoa, mixiote, chiles rellenos, etcétera.

Las cervezas ale combinan muy bien con platillos de sabores ligeros y frutales, ya que redondean el sabor dulzón, pero también pueden realzar el picante de platos como las alitas de pollo. Una cerveza bock, más fuerte y con ligero sabor a caramelo, es excelente para comer con alimentos como una pizza de carnes frías.

De postre, una cerveza belgian ale para degustar con una tabla de quesos, o bien, la cerveza stout es la acompañante perfecta para el sabor, por ejemplo, de unas trufas de chocolate amargo.

Las bodas de la güera was last modified: agosto 31st, 2017 by Mexicanisimo

Comentarios

comentarios

Salir de la versión móvil