“Porque, sin buscarte te ando encontrando por todos lados, principalmente cuando cierro los ojos.” – Julio Cortázar
Todos hemos estado enamorados alguna vez. Algunos dicen que amar es encontrar la propia felicidad en la felicidad ajena; otros aseguran que es la pasión más fuerte, pues afecta simultáneamente a la cabeza, al corazón y a los cinco sentidos.
Desde mi punto de vista, amar es coincidir con un alma complementaria y compartir mutuamente la felicidad, tristezas y enojos; es vivir aventuras inolvidables y momentos que se vuelven infinitos y que queremos revivir todo el tiempo.
Es común enamorarse de quién no imaginábamos, en un momento en el que no lo considerábamos siquiera. El amor no se elige, él nos elige a nosotros y cuando estamos dispuestos a disfrutar de todo lo que nos ofrece y enseña, logramos entender una buena parte de la espiritualidad de la existencia humana.
“Para las pequeñas criaturas como nosotros, la inmensidad es soportable sólo a través del amor.” – Carl Sagan
Son pocos los que tienen suficiente valentía para enamorarse del todo, pero a lo largo de la historia de nuestro país ha habido muchas parejas que destacan por tener historias peculiares, distintas y románticas que nos conquistan a todos. A continuación, algunas de ellas.
1. Atl y Nahui Olin
“Un amor tan intenso que se confunde con el odio” es como algunos describen la famosa relación entre el pintor Gerardo Murillo y la poeta Carmen Mondragón, artistas de personalidades fuertes pero que lograron una relación importante para la historia el siglo XX mexicano.
Ella era sensual, atrevida y con una mentalidad muy adelantada para la época. Él era infatigable, revolucionario y estudioso en el medio artístico y académico. Nunca se dejaron de amar, pero vivieron incontables rupturas y reconciliaciones ya que debido a diferencias temperamentales, sociales y de edad, la convivencia era muy difícil. En la actualidad hay 200 cartas que la poeta le envió a Murillo; cartas de amor inflamadas y radioactivas que representan por completo su relación.
2. María Félix y Agustín Lara
“Te dije muchas palabras de esas bonitas, con que se arrullan los corazones, pidiendo que me quisieras, que convirtieras en realidades mis ilusiones.” El famoso cantautor mexicano compuso estos románticos versos para su entonces esposa María Félix, con quien contrajo matrimonio en 1945. Aunque Lara era un conquistador nato y muchos afirman que le era siempre infiel, su romance con María fue auténtico y surgió gracias a la perseverancia de ella, que afirmó que se casaría con él desde su primer encuentro con el músico.
María y Agustín eran la pareja del momento, causaron polémicas a pesar de la corta duración de su relación y fueron objeto de escándalos y críticas. Como esposos, María comenzaba a hacerse más famosa, mientras que el compositor había pasado su etapa más prolífica; algunos dicen que la fama de ella fue la que hizo que terminara la relación.
3. Diego Rivera y Lupe Marín
Lupe Marín fue una mujer inteligente y talentosa. Era una gran cocinera, fue modelo y crítica de la pintura de Diego, era rebelde y podía ser hiriente y destructora si se lo proponía. Lupe tenía sentido común y “se tragó a Frida Kahlo” según los grandes pensadores de la época.
Elena Poniatowska escribió en 2015 una novela que relata la vida de Lupe y muchos de los acontecimientos vividos con Diego. En el capítulo inicial se lee: “Guadalupe viene hacia él, sus labios de gajos rojos se caen de tan llenos, sus manos sobre su vientre se abren y Diego la abarca entera, alta como él, voraz como él.”
4. Elena Garro y Octavio Paz
Se dice que la escritora vivió toda su vida opacada por la grandeza de su marido, quien no la dejaba escribir ni estudiar. Fue amada por Paz, pero sus acciones indican que había cierto odio o envidia que lo hacía tener conductas patriarcales y prohibitivas con su mujer.
Elena afirma que Octavio y sus amigos la engañaron para que se casara con él luego de dos años de novios, pero ella era demasiado lista como para haber podido ser timada de tal forma por el escritor. De igual modo, muchos afirman que no se le reconoció el derecho a la felicidad y que fue repudiada, odiada, desorientada y transitó sola por una existencia que no le dio la oportunidad de crecer como era merecido.
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5. Pedro Infante y María Luisa León
María Luisa fue la única mujer que contrajo matrimonio con el guapo cantante y actor mexicano. Se casaron muy jóvenes y, según ella, sólo tenían amor, juventud y miseria, pues empezaron su relación antes de que él se hiciera famoso.
Su romance fue como una novela de amor, los días comenzaban con un beso y una bendición y aunque comían sólo una vez al día, su amor podía más que cualquier cosa. Tristemente, terminaron su romántica historia cuando él comenzó a involucrarse con otras actrices, aunque María Luisa y él nunca se pudieron divorciar a pesar de llevar el caso hasta la corte.
Como podemos ver y muchos lo hemos experimentado, no todo en el amor es color de rosa y así como hay finales felices, también hay sucesos que nunca se pueden reparar y terminan por dar fin a una relación. Hay que atrevernos y ser valientes como estas 5 parejas mexicanas, pues el amor nos enseña cosas que no se pueden aprender en ninguna otra parte.
