La fotografía mexicana de Graciela Iturbide se conjuga con lo francófono en Pretoria
Pedro López Hernández
A partir de 1970, se estipuló que el 20 de marzo estaba dedicado a la celebración de la Francofonía, homenaje a los esfuerzos para promover el francés y mostrar la diversidad cultural entre los territorios que lo practican, ya sea como primero, segundo o tercer idioma.
Pese a que la promoción de territorios francófonos estaba destinada a una fecha específica, se extendió inclusive a gran parte del mes de marzo, con la finalidad de mostrar cuán importante es esta lengua romance alrededor del mundo. Cabe decir que la República Mexicana es una de las naciones latinoamericanas donde el francés tiene practicantes.
En este marco, la Embajada de México en colaboración con la Alianza Francesa de Pretoria, participó en el Festival de la Francofonía, algo destacable, pues representa el debut presencial del país americano en estas actividades. Así lo explica la Embajadora mexicana en Sudáfrica, Sara Valdés Bolaños:
“México ingresó como Estado observador de la Organización Internacional de la Francofonía en 2014, entonces cumplimos nueve años. En esta ocasión es básicamente un Organismo de cooperación, que reúne países francófonos y a aquellos donde se enseña-aprende la lengua francesa, o bien, se utiliza, al punto de que existe un acercamiento importante con ella. México siempre procura ser parte de estas actividades. En el caso de Sudáfrica, tengo el agrado de informar que este año es la primera vez que nos sumamos de manera presencial al festival, pues durante los años de confinamiento, tuvimos actividades, pero eran virtuales”.
En medio del programa, podía contemplarse la participación de la Embajada con dos documentales dedicados a la fotógrafa mexicana Graciela Iturbide, los cuales fueron proyectados el jueves 30 de marzo, a las 18:00 hrs. de Sudáfrica. La tierra azteca no carece de temáticas relacionadas con lo francés, desde arquitectura hasta ciertas costumbres, sin embargo, debido a que el trabajo de Iturbide resalta cuestiones exuberantes, inclusive es un testigo visual de la grandeza del territorio (pues expone personas, paisajes y tópicos con un foco innovador), se decidió que el público sudafricano debía tener un acercamiento más profundo con ella y a través suyo, conocer otra cara de la nación tricolor.
La Embajadora de México en la presentación de los documentales
Además, el objetivo de México como Estado observador era generar una gran conexión, pensando en otros países que componen el espacio sideral de la lengua francesa y cabe decir que una cantidad considerable de regiones africanas utilizan el francés como lengua oficial. Es decir, se contempló mostrar algo que todas las naciones posean o un elemento con el que puedan identificarse y lograr la comunicación, así como el intercambio de aspectos, culturales o ideológicos, tal como lo explica la Embajadora Valdés Bolaños:
“Los dos cortometrajes que presentamos se refieren a la exposición retrospectiva de Graciela, organizada desde el 12 de febrero hasta el 29 de mayo de 2022 por la Fundación Cartier, ubicada en París. Esta muestra es tal vez la más grande dedicada a ella, llamada Heliotropo 37 (Héliotrope 37). Es importante decir que la labor de la fotógrafa es poco conocida en esta parte del mundo, pero tiene una proyección muy internacional y sumamente ligada al mundo francófono. Por tal razón, proyectamos estos dos cortos, el primero que aborda una descripción realizada por ella misma, concerniente a su trabajo y a la preparación de la exposición mencionada; el segundo refiere un encuentro debate (Rencontre avec Graciela Iturbide et Eduardo Halfon) que Iturbide tuvo con el escritor guatemalteco, Eduardo Halfon, dialogo de gran riqueza que explica cómo la cultura es un lenguaje universal. Se trata de una entrevista realmente conmovedora, donde un escritor y una fotógrafa describen sus procesos de creación, relacionados con sus biografías. Fue fantástica la forma en que estas muestras llegaron al corazón del público. Lo interesante es que a pesar de ser videos, tuvieron muchísimo exitoso, porque todo fue muy apreciado”.
Uno de los aspectos a resaltar es la aceptación de la cultura mexicana y latina en Sudáfrica, al punto de que existe esta curiosidad por aprender de otras expresiones, asimismo hay interés en conocer la visión del mundo que cada artista mujer ofrece. Si bien, las fotografías de Iturbide impactaron por el contenido, cabe añadir que también tocaron corazones y los bañaron de entusiasmo, quizá propio del asombro, o bien, por la sorpresa humana que sobreviene ante lo desconocido. Como se ha dicho, esta recepción también es fruto del encanto que produce lo realizado por mujeres latinas que han consagrado su vida la arte:
“El año pasado albergamos una exposición muy bonita en Johannesburgo, que reunía a tres artistas del Modernismo, más o menos de la misma generación, como son Frida Kahlo, Amrita Sher-Gil (de India) e Irma Stern (pintora sudafricana). Esto demuestra la disposición a conocer, interpretar y dialogar respecto a las visiones femeninas del mundo. La presente actividad en la Alianza Francesa, nos ayudó a contemplar la idea de presentar el proceso creativo de Graciela Iturbide, con la esperanza de poder recibir una exposición de su obra fotográfica, probablemente en un futuro cercano”.
La diferencia de continentes y de ubicaciones, debido a la línea del Ecuador, no limita la existencia de similitudes entre Sudáfrica y México, como la importancia del rescate de lenguas, pues en el primero existen once lenguas oficiales, y en el segundo lidera el español, pero posee un amplio río de herencias propias de variedades lingüísticas, orgullo de un pasado glorioso. Por otro lado, la variedad climática es algo en común, además de la cantidad de culturas que convivieron, en aspectos culinarios, históricos y sociales, para formar la cara de lo que podemos apreciar en la actualidad.
Además, la representante mexicana, Sara Valdés Bolaños recalcó que adentrarse al mundo sudafricano es una oportunidad imperdible: “Me gustaría mucho invitarlos a conocer un poquito más de lo que se hace en estas latitudes, no sólo por parte de México, sino por parte de los creadores locales. Gracias a la tecnología y a muchísimas iniciativas de difusión en línea, del arte y de la cultura, se puede conocer mejor cómo es esta región, aunado al amplio universo de la creación de regiones como África austral, algo que vale mucho la pena explorar”.
La promoción de la cultura mexicana apenas comienza, aunque este evento fue un paso muy importante para abrir camino a la misma, inclusive al intercambio de riquezas con África, un continente que igualmente deja huella en México desde tiempos remotos.
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