Las bodas de oro del metro de la CDMX
La Ciudad de México está de manteles largos celebrando las bodas de oro de su transporte urbano más utilizado: el metro que se inauguró el 4 de septiembre de 1969.
El metro, siempre se bueno recordarlo, es un sistema de transporte dentro de una ciudad que utiliza trenes urbanos que conectan diferentes puntos de una misma ciudad y su área metropolitana. El metro es un transporte masivo y rápido que llegó para agilizar y facilitar la vida citadina de las grandes ciudades.
Los trenes del metro pueden circular en la superficie, de forma subterránea o combinando ambas modalidades (que es lo más usual). Los trenes circulan por distintas líneas con estaciones ubicadas a intervalos más o menos equidistantes y no lejanas unas de otras.
El primer metro de este mundo se inauguró el 10 de enero de 1863 en Londres, un siglo antes de que llegase a nuestra capital. A su vez, la red de metro más extensa en la actualidad es la de Nueva York, con 24 líneas y cerca de 470 estaciones. En el caso del metro de la CDMX, hoy día cuenta con 12 líneas y 195 estaciones.
Miles de personas utilizan diariamente este sistema de transporte en la Ciudad de México, de hecho, el promedio es de más de cinco millones y medio de pasajeros diarios, así que cuando vayas a quejarte porque el metro está “atascado” piensa mejor en la maravillosa oportunidad que esos trenes le están ofreciendo a tantos millones de personas que, como tú, necesitan llegar a otra parte de la ciudad.
Aquí, algunos datos curiosos sobre el Metro de la CDMX que quizá no conocías y que, si vas en el metro, te servirán de entretenimiento en lo que llegas a tu destino:
El metro de la CDMX fue el primero a nivel mundial en distinguir sus líneas por colores y en identificar cada estación con un símbolo alusivo a la zona en la que se ubica. Este modelo de señalización, creado en México para facilitar los viajes al alto número de personas que todavía eran analfabetas en esos años, ha sido imitado por su practicidad en otras muchas ciudades del mundo.
En 1968, cuando se estaba escavando para la construcción de la estación Balderas, los trabajadores encontraron el cráneo de un hombre que fue bautizado como “el hombre del Metro Balderas”. Los estudios que se le hicieron al cráneo revelaron que se trataba de un hombre de entre 35 y 40 años y de una antigüedad de más de 11 mil años.
Para incentivar la actividad física y el uso de las escaleras tradicionales frente a las escaleras eléctricas, varios escalones de la estación Polanco fueron intervenidos para que funcionen como teclas de un piano, de este modo, al pisar en la nota de cada escalón, éstos suenan con las notas que emitiría el instrumento.
¿Te has preguntado por qué la entrada de Metro Bellas Artes es igual a las entradas parisinas? Pues porque el metro de París donó esta entrada a cambio de un fresco mexicano que hoy adorna una de sus estaciones.
Así que celebremos el quincuagésimo aniversario del metro con un viajecito por la línea de su preferencia.
Fotografía principal: CDMX Metro de Paul Sableman, CC BY 2.0
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