Más tiempo de pantalla para el cine mexicano, principal proclama actual
Noticine.com-CorreCamara.com
La Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados, durante la reunión celebrada el pasado 3 de abril bajo la presidencia de Sergio Mayer, solicitó un aumento del tiempo en pantalla para el cine mexicano, además de una renovación del escenario digital del mismo. Durante el encuentro, se puso sobre la mesa el debate de reforma de la Ley Federal de Cine, guiado por las opiniones de distintos expertos relacionados con la industria cinematográfica del país.
En las conversaciones, una de las primeras exigencias fue aumentar el 10% de presencia en salas –cifra marcada por la ley actual– a un 30%. «Se hacen más de 150 largometrajes al año. Solicitamos el 30 por ciento de pantallas», dijo Gabriel Retes, director de El bulto y Bienvenido Welcome.
Por su parte, Ernesto Contreras, presidente de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, señaló que la exhibición para filmes nacionales no había tenido un proceso de crecimiento equivalente al de la producción, motivado bajo el argumento de que en México una cinta hollywoodense obtiene el estreno en más de 4 mil pantallas, es decir, casi un 80% de las totales existentes en el país.
«La falta de políticas claras de apoyo a la exhibición de películas nacionales, así como de herramientas normativas que frenen las prácticas casi monopólicas del cine norteamericano y sus aliados comerciales en exhibición ha impedido que el cine mexicano tenga una presencia en pantalla proporcional a su nivel de producción y reconocimiento», expuso.
Ante esta situación, Mónica Lozano, productora de obras como No se aceptan devoluciones, se unió a sus compañeros para solicitar la regulación del artículo 19 de la ley, por el cual se establece que los exhibidores deben dar el 10% del tiempo total de exhibición. «No hay sanción de ley si no se hace», explicó.
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica expuso también sus opiniones, y lo hizo bajo la consideración de que un aumento en cuota no tenía por qué significar una mayor presencia de espectadores. Solidificando su argumento, expuso: «hablando como productor, estrenamos en 1,300 pantallas Ahí viene Cascarrabias –cinta animada– y nadie la fue a ver».
Antes las dispares opiniones, Ramón Ramírez, de la exhibidora Cinépolis, indicó a título personal que el diálogo continuaba abierto, una discusión que abrazó también la urgencia de legislar sobre contenidos digitales. «La ley es una momia ante el escenario digital», subrayó Víctor Ugalde, presidente del Observatorio Público Cinematográfico Rafael E. Portas A.C.
A la espera de nuevas conversaciones que terminen por resolver dichas cuestiones, Mayer convocó una nueva reunión para discutir los tiempos en pantalla, que tendrá lugar durante las próximas semanas.
Foto: Twitter.
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