Hace algunos meses la Brigada Para Leer en Libertad organizó un curso de escritura. En el cartel solo figuraban hombres. Inmediatamente las escritoras y la comunidad cuestionaron esta decisión. La Brigada justificó el hecho diciendo que las escritoras que habían sido invitadas (solo 3 y se tenían 10 lugares disponibles) a participar no pudieron hacerlo. ¿Es que son las únicas escritoras? No.
Surgieron listas de escritoras que fácilmente, por su calidad literaria, pudieron ocupar esos tres lugares (y más).
Afortunadamente vivimos en una época en la que la tecnología nos permite estar mejor y más comunicados. Así, a pesar de situaciones recientes como la pandemia y el encierro, y otras no tanto como la invisibilización sistemática de la literatura escrita por mujeres, ellas han podido darle difusión a su obra a través de la autopublicación y también por medio de las redes sociales.
Escritoras como Carmen Boullosa Y Magdalena Pérez (autora de Mäywen) han incluso rescatado las voces de mujeres del pasado.
Magdalena, por ejemplo, imparte un curso on line en el que las voces de escritoras como Teresa de Ávila, María de Zayas y Juana Inés de Asbaje están siendo estudiadas desde sus ideas abiertamente feministas en siglos en donde las opciones para la mujer se reducían a un matrimonio arreglado o a un convento.
Por otro lado, Carmen Boullosa comparte videos en los que habla de autoras hispanoamericanas de los siglos XVI al XX, fundamentales para la historia de nuestra lengua.
Entre otros medios que se enfocan en el rescate y difusión de la literatura escrita por mujeres están el colectivo Libros b4 Tipos que difunde la obra de escritoras de todo el mundo y de todas las épocas. El colectivo lee en conjunto y después comparte sus experiencias de lectura. Por último, Escritoras Mexicanas es un proyecto cultural que difunde la obra de escritoras mexicanas de todas las épocas (y con quienes Paralelo 21 publicó a la ganadora y al segundo lugar del Primer Concurso de Novela Corta de Escritoras Mexicanas).
