Grandes nombres han desfilado por el escenario de la música de orquesta en nuestro país.…
Natalia Priego
Natalia Priego
Orgullosa licenciada en Letras Hispánicas. Lectora, correctora y articulista de pasión y de profesión. Mexicanísima de hueso colorado.
-
-
La historia está llena de personajes que, con el tiempo, los hemos convertido en verdaderos…
-
Hablar de literatura mexicana es un tema complejo que plantea muchas interrogantes, una de ellas, quizá la más importante es: ¿de qué literatura hablamos? Si bien en nuestro país la lengua que más se habla –y por ende escribe– es el español, de acuerdo con el INALI existen 68 lenguas indígenas vivas, de las cuales derivan 364 variantes lingüísticas. Entonces, cuando hablamos de literatura mexicana es preciso enfatizar si nos referimos a la escrita en español, en náhuatl, en maya yucateco, en zapoteco, en mixe o en cualquiera de sus variantes, pues como cualquier otra lengua, las indígenas tienen la capacidad de alcanzar un nivel simbólico y metafórico, es decir, producir literatura.
-
Su éxito en el cine ya estaba escrito. Cierto día, mientras caminaba por las calles…
-
Capas de historia y relatos conforman el Centro Histórico de la Ciudad de México. Basta pararse en medio de la plaza del Zócalo y recorrer con la mirada todos los edificios que se encuentran alrededor: el Palacio Nacional, cuyos muros albergan los objetos personales de uno de los grandes presidentes de nuestro país, Benito Juárez, junto a los murales de Diego Rivera; el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, fundado por Hernán Cortés; la Catedral de México que se remonta a 1571 y, hasta hoy día, se erige orgullosa e imponente a un lado del que algún día fue el centro ceremonial más importante de los mexicas, el Templo Mayor.
-
En las grandes urbes como la Ciudad de México, el uso de la bicicleta como medio de transporte se ha incrementado rápidamente, al grado de convertirse en todo un estilo de vida. Este gran invento se remonta a la época posterior a la Revolución Industrial en Inglaterra. En un inicio, su uso era exclusivo de las clases adineradas y como mero entretenimiento, sin embargo por ser un medio de transporte práctico, económico y veloz su demanda aumentó y con el tiempo se extendió entre toda la población.
-
Como los sujetos sensibles que somos conocemos el mundo que nos rodea a través de nuestros sentidos. Estos son la vía para que nuestro cerebro responda a los estímulos provenientes del exterior. Suena fácil decirlo, pero ¿qué pasa cuando carecemos de uno de estos sentidos o el cerebro responde de formas distintas a las naturales? Pues el mundo se percibe de otra forma, la realidad –esa convención que se construye según la cultura y la situación particular de quien la define – se siente, se oye, se huele, se sabe y se ve distinta. Esto lo saben muy bien los integrantes de Pacos A.C. (Programa de Atención a la Comunidad Orientado a la Socialización) un grupo de jóvenes con distintos grados de discapacidad intelectual que logró hacer de estas diferencias una unidad.
-
Cuando hablamos de bebidas típicas de México el pulque, el mezcal y el tequila encabezan la lista, sin embargo los mexicanos tenemos un paladar universal que gusta de otros líquidos igualmente embriagantes. La cerveza, por ejemplo. Hoy día, esta bebida es sumamente aclamada en bares y cantinas de nuestro país, incluso para algunos, es el acompañante fiel del tequila, empero, esto no siempre fue así.
-
Muchas son las formas en las que podemos conocer la historia de México. A través de libros, películas, leyendas o fotografías, pero también por los edificios y construcciones que hasta la actualidad conservamos en nuestro país. Verdaderos s.obrevivientes del tiempo, guerras, batallas e, incluso, de las modas arquitectónicas y urbanísticas
-
Los orígenes de este santuario del saber, ubicado en el corazón de la colonial ciudad de Puebla, se remontan a los siglos XVII y XVIII cuando el obispo Juan de Palafox y Mendoza tomó la revolucionaria y benevolente decisión de crear una biblioteca pública –la primera en México y en el continente americano– para que los seminaristas de los colegios de San Pedro, San Pablo y San Juan Evangelista pudieran estudiar y tener acceso libre a libros y documentos.