La presencia de las esferas en los aparadores, hogares y calles guarda muchos significados: el término de un año intenso, el recuerdo de la reunión familiar, o simplemente formar parte de la indumentaria navideña. Sin embargo, para los habitantes de Chignahuapan y Tlalpujahua, también simboliza el fruto de un oficio realizado durante todo el año que nutre a los arbolitos de rincones nacionales y del mundo.